viernes, 27 de mayo de 2016

ENTRENAS EN FUNCIÓN DEL JUEGO. EL JUEGO TE LO VA A CONDICIONAR EL JUGADOR. TITO RAMALLO.


TITO RAMALLO: “ENTRENAS EN FUNCIÓN DEL JUEGO, PERO EL JUEGO TE LO VA A CONDICIONAR EL JUGADOR”.
por @aizcorbes y @davidsanchezmer

@titoramallo
Una vida ligada al fútbol. Media vida en el club de sus amores, el Depor. 20 temporadas como miembro de la estructura técnica del Deportivo de la Coruña. 11 al cargo del Fabril, filial deportivista, como primer entrenador. Antes, preparador físico. Después, miembro de la secretaría técnica, scouter del primer equipo y profesor de táctica en su escuela de entrenadores. Tito Ramallo es uno de los entrenadores de referencia en el mundo del entrenamiento. Un maestro a la hora de desaprender y reaprender en materia futbolística. Un pionero metodológico. Un hombre abierto, cercano y honesto.

Pep Marí nos dejó esta pregunta para ti: “¿Qué valores definen a un buen profesional?”
La coherencia entre lo que dice y lo que hace. La formación para justificar sus acciones. La seriedad y formalidad en su forma de trabajar, y la pasión para llevarlo a cabo.
¿Cómo ha condicionado el fútbol tu vida?
Ha sido y es un elemento inseparable. Desde que tengo uso de razón el fútbol nunca ha desaparecido de mi día a día, desde distintos ámbitos, lógicamente, pero no hay día que no piense o hable de fútbol.
¿En qué momento de tu vida decidiste que serías entrenador de fútbol y por qué?
Fue algo natural, un proceso continuo, sin un punto de arranque . Desde muy pronto sabía que sería mi futuro. Dejé de jugar a los 25 años para pasarme al área técnica. De los últimos 20 años he pasado 18 pegado a los banquillos. Y los otros dos, dando clase en la escuela de entrenadores del R.C.Deportivo y como analista en la TVG. Es decir, más de lo mismo. Sin desenganche posible.
¿Cuáles crees que han sido los principales cambios metodológicos en el fútbol en la última década? ¿Y cuáles crees que están por venir?
El concepto de que el JUEGO es el centro ha cambiado el prisma de toda la metodología. Ha provocado que el fútbol adquiera concepciones propias, sin tener que echar mano de otras externas al propio fútbol. La concepción del TODO como referencia y el JUGADOR como elemento principal del proceso marcan las líneas a seguir en el futuro.
¿Qué son para ti táctica, técnica, preparación física y psicología en el fútbol?
Elementos interrelacionados que no pueden sobrevivir de manera coherente dentro de un contexto si los tratamos por separado. Eso no significa que no los distingamos, pero en ningún caso los trataremos por separado.
¿Es la Táctica una supradimensión que contiene y de la que a la vez derivan las otras tres? ¿Por qué?
Para mí forma de entender el entrenamiento quiero que sea la táctica la que gobierne sobre las demás, pero entendiendo que ella misma no puede entenderse sin la globalidad de todas en una acción común.
¿Cómo definirías tu metodología de entrenamiento? ¿Qué principios la sustentan?
Más que una metodología propia, me gusta decir: una manera de interpretar el entrenamiento, porque lo que hago es transformar el prisma con el que quiero mirar los elementos que ya estaban ahí.
Mi manera de entender el entrenamiento recoge muchos aspectos recogidos principalmente de la Periodización Táctica, algo del Microciclo Estructurado y, por supuesto, como a todos, de las experiencias personales acumuladas como jugador y entrenador.
¿Qué es la Intensidad Táctica?¿Cómo podemos cuantificar dicha intensidad, hasta qué punto es cuantificable y por qué debemos cuantificarla?
Tres preguntas en una y posiblemente complejas de explicar en pocas palabras.
Me voy a ceñir a la definición que doy: ” El nivel de concentración que un futbolista tiene que mantener para la comprensión y ejecución de las tareas enfocadas a la resolución de acciones tácticas.”
El factor que eleva la exigencia de esa Intensidad Táctica viene determinada por el número de momentos que tiene la tarea. Previamente, el estudio de las tareas que tiene el entrenamiento fue necesario para clasificarlas. Así, determinar 3 tipos, que van de menor a mayor nivel: coordinativas, principios y tareas tácticas. La tarea más exigente de todas será, por lo tanto, una tarea táctica de IT=12.
Las cuantificamos para identificar el nivel de exigencia al que sometemos al jugador y con ello, poder ordenar el proceso de entrenamiento.
¿Cómo combinas estas dos metodologías, la Periodización Táctica y la Estructuralista?
La idea de Intensidad Táctica nació de la lectura de estas dos tendencias, de lo que decía Seirulo y de lo que decía Frade. De una y de otra fui cogiendo determinadas cosas.
¿Entrenar el Juego del equipo de una forma específica, sin alejarnos de ese Jugar, como idea relacionada con la Periodización Táctica, y el jugador como sistema complejo, como idea de la metodología Estructuralista?
Es que ahí confluyen las dos ideas para mí. Yo tengo que jugar un Juego donde el futbolista realmente me condiciona la manera que yo tengo de afrontarlo. Incluso de entrenar, porque yo puedo tener una Idea de Juego, pero si no tengo esos jugadores… lo que yo tengo que entrenar con esos jugadores, dentro de una relación lógica, va a ser distinto. Por eso el juego del futbolista es el centro. Me condiciona lo que yo pueda entrenar en el juego, porque tú como jugador me podrás dar una serie de respuestas determinadas, pero a lo mejor otro jugador ante la misma acción me da otras respuestas distintas. Entonces yo tengo que adaptar mi entrenamiento a las respuestas que me va a dar ese futbolista. No lo puedo cambiar, iría en contra del futbolista Yo tengo que tener claro lo que me puede dar el futbolista para preparar esas situaciones en el Juego.
Adaptación al contexto. A un nivel micro, adaptación al jugador. Y a partir de ahí del jugador a la interrelación de todos los jugadores para poder establecer un Juego determinado.
Claro, pero al final los dos ocupan ese centro –jugador y Juego– porque tú entrenas en función del Juego, pero el Juego te lo va a condicionar el jugador. Entonces, esa relación mutua es importantísima de mantener. Yo no puedo decir: “voy a jugar a esto” sin saber lo que tengo, sin saber qué clase de jugador. Y no le puedes decir al jugador: “tú vas a jugar a lo que yo quiero” si él no lo tiene. Entonces, si las dos maneras de entenderlo –jugador y Juego– no eres capaz de juntarlas existirá una confrontación en algún momento determinado.

¿Cuáles han sido tus últimas reflexiones e innovaciones?
Respecto a la intensidad táctica estoy inmerso en la posibilidad de realizar una publicación, sacarlo en libro. He ampliado aquella parte que hablaba de las tareas, he incluido las tareas de Principios, he clasificado los tipos de sesiones para poder etiquetarlas dentro de la intensidad táctica. Por ejemplo, el comienzo de la temporada, distribuyo las sesiones iniciales, donde no quiero someter al futbolista a una alta fatiga física. Al contrario, debes entrenar dentro de la mayor frescura posible porque el jugador debe de interpretar y asimilar un modelo de juego. Y se matiza mucho más la semana tipo, para plasmarla en una publicación y que la gente pueda ver mucho mejor el desarrollo, cómo construirla.
Más allá de la idea inicial, que fue la medición de las tareas, se ha desarrollado una manera más abierta de entrenar en Intensidad Táctica.
Quiero que sea una lectura ligera, capítulos cortos, lecturas rápidas. A mi me gusta mucho el aspecto visual. Vale más una imagen para que te cuenten una idea.
¿ Cómo estructuras una temporada a nivel de planificación?
La planificación viene determinada por 44-48 microciclos de los que consta una temporada.
No hay estructuras intermedias.
La idea es programar semana a semana.
Y a nivel semanal, ¿qué variables contemplas para estructurar un microciclo?
La repuesta del equipo, tácticamente, en el partido anterior –aspectos positivos y negativos– y la preparación específica del equipo ante el próximo rival. Por supuesto, respetando las señas de identidad del modelo de juego que adoptas.
¿Qué es para ti especificidad?¿Cómo aplicarla al entrenamiento?
La especificidad es prepararse para dar una respuesta eficaz ante la variabilidad de contextos que se te pueden presentar en el juego.
La aplicación al entrenamiento es asemejar lo máximo posible el entrenamiento a la competición.
¿Cómo se dota al equipo de una identidad propia?
Confluyendo la idea del entrenador con las aptitudes de sus jugadores. A partir de ahí, dotar a ese colectivo de una manera de pensar conjunta y manifestarla en cada nuevo contexto que te presenta el juego. Para ello, el entrenamiento nos preparará para que esa situación que se presente, tenga determinadas respuestas siempre identificativas con el grupo.
¿Cómo podemos establecer una estrategia operativa para cada partido y rival sin perder nuestra identidad?
Teniendo claro quién eres, lo que quieres y cómo conseguirlo. Potenciando tus virtudes y aprovechándote de las debilidades del rival. Esa es la clave para poder ganar cada partido. Eso no conlleva que tengas que traicionar tu ideario, pero sí que tengas que adaptarte al contexto que se te presenta, para ser mejor que el rival que tienes enfrente.

Estuviste recientemente en el Congreso Internacional sobre Periodización Táctica celebrado en Roma. ¿Qué nos puedes comentar sobre la situación del entrenamiento en Italia?, un gigante del fútbol venido a menos en los últimos años.
Lo que me transmitieron las conversaciones que tuve con ellos, es que siguen muy vinculados al entrenamiento tradicional, pero con muchas ganas de abrirse a las nuevas tendencias. Yo creo que sobre todo es lo que España y Portugal están llevando al fútbol europeo. Por ejemplo, Inglaterra se dio cuenta que también tenía que cambiar su fútbol. ¿Cómo lo ha hecho Inglaterra? Fichando entrenadores y sobre todo jugadores, muchos españoles, jugadores de talento. Están cambiando el fútbol desde los jugadores. Y los italianos eso no lo van a hacer porque ellos son muy de sus futbolistas. La manera en la que van a tener que cambiar su fútbol va a ser desde los entrenadores, desde la metodología. Van a tener que adaptar ese chip. Van a ir en esa línea y van a abrirse a las nuevas tendencias de entrenamiento.
En Italia hay una gran cultura táctica, pero no acaba de dar ese siguiente paso a nivel metodológico.
En cuanto a la cultura táctica, comparto la misma opinión. Para mí tienen uno de los grandes maestros que ha dado el fútbol, Arrigo Sacchi. Él ha sido uno de los grandes innovadores a nivel táctico. Pero creo que ellos ahora mismo tienen que dar ese paso a nivel metodológico. Es por lo menos, la sensación que me quedó tras mi última visita. Es lo que les dije, en el momento en que ellos den ese paso volverán a estar a niveles competitivos altísimos. Porque con la cultura táctica, con el nivel de sus futbolistas, si le das esa especificidad en el tiempo que ahora mismo están gastando en otras cosas, cuando sean capaces de optimizar su entrenamiento todo cambia. Ese pequeño porcentaje que supone en el alto rendimiento lo van a obtener. Cuando lo obtengan, yo creo que van a dar un salto importante otra vez. Su mejora pasa por ahí.
Tienen el qué, que es el conocimiento del juego, pero no tienen el cómo, que es el entrenamiento, el cómo utilizar ese conocimiento del juego para poder entrenarlo bien y trasladarlo al partido.
Sí, porque todavía –y es algo que me transmitían ellos– todavía siguen agarrados al entrenamiento tradicional y hasta que no consigan dar este paso no van a avanzar.
La experiencia allí fue genial. La gente que nos invitó muy bien, muy contentos. Querían más información. La Periodización Táctica era el tema central, el nexo. A mí me llamaron para comentarles sobre la Intensidad Táctica, por ser una tendencia de esa línea. Ellos estaban muy interesados. Y sobre todo, en entrenar en función del Juego y del modelo de juego que tú tienes. Yo creo que allí entrenan todos igual, da igual cómo jueguen. Es un poco como en España antes. Tú ibas a ver entrenar a un equipo y otro y entrenaban igual. Eso tiene que ser imposible, no puede ser. Si tú y yo tenemos distintos modelos no podemos entrenar igual. Habrá cosas semejantes, cosas que yo utilice diferentes y otras que tú utilices, pero no podemos entrenar igual. Por ejemplo, vas a ver a un equipo que lucha por ser campeón de liga y vas a ver a uno que lucha por no descender y entrenan igual. No puede ser. Ahí es donde, para mí, debemos seguir matizando las cosas. Ahí es donde la especificidad del contexto se tiene que preparar. Yo creo que ellos cuando lo consigan darán un paso. Y tienen ganas de cambiar, ya verás.
Y ahí has ido tú, a dar difusión a las ideas.
Es lo más importante, darle difusión a las cosas. Y luego que cada uno saque lo que quiera de cada uno, pero lo importante es que se transmitan cosas. Habrá cosas que te gusten, cosas que no, o de éste coges una y de éste coges dos, o de éste ninguna. Pero es la manera de transformar el entrenamiento, de transformar las cosas.
¿Antes sabes lo que hacían los entrenadores? No enseñaban lo que hacían. Pero te digo una cosa, antes lo tenían mucho más fácil porque no tenían las redes sociales. Esto no te permite escaparte de ningún filtro. Así que cuando la información no la puedes controlar lo que tienes que hacer es encauzarla, y eso es a lo que ayudan las redes sociales.
Pero volviendo al tema metodológico, en España el gran cambio se produjo cuando entrenadores y jugadores, todos a la vez, empezaron a comprender el porqué de las cosas, a comprender el juego. Eso facilitó todo el proceso. Eso es como todo… mira, una metodología triunfa, o se pone de moda, o sale adelante, muchas veces porque obtienen triunfos con ella los que tienen que obtenerlos. Si aquella selección o aquel Barça de Guardiola no salen adelante, o esos equipos de Mourinho…¡Porque la Periodización Táctica está ahí desde los años 80!¿Cuándo empezó a salir a la luz? Cuando la gente dijo: “¿Por qué gana este equipo?”. Y empezó a buscar elementos. Y éste gana, entre otras cosas, por la Periodización Táctica. Y estos ganan porque entienden el juego, y juegan a partir del juego porque el jugador es lo importante. Pues eso es lo que pasa, las metodologías salen adelante muchas veces en función de los triunfos. Si España no hubiese ganado ese Mundial y esos títulos de Guardiola… a lo mejor, esta forma de pensar en el fútbol español no hubiese salido adelante. Y volveríamos a la furia, a la España de jugar “más físico” y no en función de los buenos jugadores. Pero por suerte eso ya es irreversible. Menos mal…

Ahora que hablas de la furia, me viene a la mente cuando la gente habla del compromiso, del correr más… y pienso en el Atlético de Madrid y de la imagen, yo creo que equivocada, que muchas veces transmiten los medios de comunicación explicando las razones de su éxito. Y se habla de esto precisamente, del compromiso, de los valores que representa este equipo, del sacrificio, etcétera. Pero no se habla de la riqueza táctica que tiene el Atleti.

El primer Atlético de Madrid del Cholo Simeone, para mí, fue de los equipos que tácticamente más me han gustado en los últimos tiempos. Porque era un equipo que estaba preparado para adaptarse…¡yo siempre hablo de los contextos! Para adaptarse a los distintos contextos del juego. Era un equipo que jugaba al contraataque cuando tenía que jugar. Era un equipo que jugaba directo cuando tenía que jugar. Era un equipo que cuando le dejaban combinaba. Y asumía el jugador esa dinámica. Yo siempre destaque en ese primer año, no el Simeone del compromiso, sino el Simeone entrenador. Por darle a su equipo versatilidad. A mí cuando me preguntan: “¿Cuál es un equipo rico tácticamente?”. No es aquel que hace una cosa muy bien, como era el Barcelona. El Barça hacía una cosa muy bien con los mejores. Y haciendo eso no le ganaba casi nadie. Pero para mí un equipo rico tácticamente, es aquel donde los jugadores pueden adaptarse de una forma natural a los cambios que da el juego. Y eso es muy difícil para un entrenador. Y todo esto sin perder la identidad. Que no te digan “no sabe ni a que juega”. Es difícil conseguir eso y no perder la identidad. Cholo Simeone lo hizo en aquel Atlético.
¿Qué pasa? Que iba acompañado de su carácter argentino. Para mí el Cholo Simeone, sabe que tiene un papel que interpretar. Pero tú ves luego al Atlético de Madrid y no corren sin sentido. No hacen las cosas por hacer. No son once locos que corren detrás de un balón y que lo hacen más que el rival.
Hay un trabajo táctico detrás.
¡Y mucho más que otros equipos! Por ejemplo, la variedad en acciones a balón parado. No hay ningún equipo que lo iguale.
Que luego trasciende a nivel público otra imagen que los medios quieren transmitir, y que él también alimenta, pues sí. Pero eso no significa que el Atlético de Madrid no sepa lo que quiere.
No trascienden tanto las tareas a nivel táctico de Simeone, si no la parte de entrenamiento que lleva el Profe Ortega.
Yo he visto alguna tarea de entrenamiento de Simeone. ¿Qué hace él muy bien? Por ejemplo, he visto una tarea defensiva en la que trabaja la anticipación. He visto algún rondo en que trabajaba la interceptación. Él le mete el aspecto emotivo de su presión como entrenador. Otros entrenadores miran, observan, dejan que el jugador tome las decisiones, se equivoque… no son muy intervencionistas. Él presiona al jugador, lo obliga al esfuerzo… Él le da el plus emotivo que tiene como entrenador. Y le aporta a la tarea ese condicionante psicológico del esfuerzo, de la exigencia. Él se la da con su insistencia. Es un elemento más que él aprovecha muy bien dentro del entrenamiento.
 Y todas estas tareas relacionadas con su modelo de juego. Pero no todo el entrenamiento como en la Periodización Táctica va relacionado con el Juego del equipo. Cogen cosas de aquí y de allá. Un poco similar a lo que se está haciendo en Argentina o Italia a día de hoy. Hay una relación entre esos dos países y él también ha estado tanto en Argentina como en Italia.
Claro. Y es que yo creo que al final, tanto la Periodización Táctica como el Microciclo Estructurado nacieron para dar respuesta a una demanda que había. Yo creo que ahora el fútbol está yendo a esa confluencia que hablábamos. El Juego es lo importante, pero es igual de importante el jugador que participa en el Juego para condicionarlo. Entonces tú tienes que trabajar las dos cosas a la vez, no se pueden separar. Tú tienes que preparar al jugador para el Juego. Entonces tienes que unir los dos elementos y tu entrenamiento tiene que ir enfocado a eso. Yo no puedo preparar una tarea para un aspecto de mi juego sin tener en cuenta quienes son los jugadores que la lleven a cabo. Es inevitable. Es más, la relación de distintos jugadores hasta puede condicionar las conductas. Si tú tienes a tu lado a un futbolista que no corre a hacer ayudas en ningún momento o al que le cuesta, tu conducta va a cambiar en comparación con otro que sabes que te va a ofrecer ayudas constantemente. Hasta te puede cambiar a ti la actitud defensiva en esa situación. En función de si juegas con uno o con otro, harás una entrada o no la haces porque sabes que como te rebasen no te va a ayudar. Pues ahí el entrenador es el que tiene que buscar la confluencia de lo que quiere en el Juego con lo que le da el jugador.
Eso es especificidad.
Justo. Pero para eso tú tienes que tener una lectura clara de lo que quieres en el Juego y de lo que tú ves que tú jugador te puede dar. Porque si no, entonces es más fácil entrenar de manera tradicional porque no te equivocas. Que es donde se agarra la gente de una manera más fuerte cuando no cambia. ¿Por qué? Porque no están seguros del paso que tienen que dar. ¿Tú qué haces cuando tienes que dar un paso y no estás seguro? Te quedas parado. Porque sabes que no te va a pasar nada. Cuando das el paso sabes que te puedes equivocar. Si vas con la seguridad de dar el paso lo vas a dar y no te va a importar. Yo creo que es ahora mismo el gran hándicap que tienen muchos.
Pero eso te cambia todo, poder entrenar de una forma específica a tu equipo. El feedback que el entrenador obtiene, la gratificación de poder entrenar a tu equipo de esa manera es inmensa.
Sí, pero tienes que estar muy convencido de que ese es el camino.
Al final un entrenador que no está seguro…
Se mantiene en su posición de distancia.
No puede funcionar.
 Sí.
Además creo en un cambio general de los entrenadores. Va a ser así, los que van a aportar eso son los entrenadores que vienen por detrás. Primero porque van a tener más formación. Yo digo que una de las cosas que ha tenido España es que el entrenador se ha formado cada vez más. Y cada vez se forma más todavía. Los primeros entrenadores, digamos que han sido entrenadores que se han hecho a sí mismos. Ellos entrenaban, el juego les puso en una situación… imitaron. Y posiblemente no entrenaban tan mal. Luego vinieron los entrenadores que empezaron a buscar formación donde no existía, en el fútbol. ¿Qué hicieron? Se fueron al atletismo, a modelos de otros deportes, y lo trasladaron al fútbol. Su formación querían dársela al fútbol. Pero una formación equivocada. ¿Qué pasa? La nueva generación, que viene formada, que ya tiene los antecedentes delante y que sabe donde tiene que ir a buscar la información, va a hacer un barrido generacional importante. Y cada vez se va a ver más..
Pero todavía se arrastra de las fases anteriores. Incluso en las facultades de educación física alrededor de España se arrastra mucho. El conocimiento anterior, de lo cuantitativo que se extrajo del atletismo, etcétera, se arrastra dentro de la formación.
Y muchos entrenadores que pasan directamente del rol de jugador, sin tiempo para una mayor formación, a entrenar adoptan las formas que han visto. Y todavía han entrenado muchos de manera tradicional. Pero cuando los entrenadores vayan formando futbolistas en las nuevas metodologías, cuando un futbolista salga de ahí para entrenar, aunque no tenga esa formación, va a adoptar los modelos que ha visto.
Los jóvenes entrenadores que salen están adoptando modelos de imitación, que todavía por desgracia mantienen muchos de los métodos tradicionales. Entonces, adoptan. Y si quieren cambiar. ¿qué hacen? Se rodean de equipos de trabajo formados. Muy inteligente por su parte. Y son ellos los que desarrollan todo el concepto del entrenamiento y los entrenadores son los que aportan…
¿La imagen?¿La gestión de vestuario?¿La experiencia?
Justo, sí. Eso es. Ellos aportan la forma y los otros el contenido, por supuesto, siempre me estoy refiriendo al apartado metodológico, deja al margen es aspecto futbolístico, la idea que tiene el entrenador sobre el fútbol que quiere para su equipo. Y es un matrimonio feliz. ¿Por qué? Porque si no a mucha gente le sería muy complicado llegar al fútbol profesional, de una manera directa, solo por su capacidad. Porque la tienen pero les sería muy complicado. Entonces tienen que llegar de la mano de equipos de trabajo o de este tipo de situaciones. Porque luego esos equipos de trabajo demuestran la capacidad que tienen.
Pero es importante que la parte que aporta la forma pueda entender aquello que incorpora la parte que aporta el contenido. Porque al final dentro de un equipo de trabajo tiene que existir esa interrelación, tiene que haber un conocimiento mutuo.
Es necesario. Pero yo también destaco que esos ex jugadores que saltan a los banquillos también vienen con la inquietud de querer aprender. Ellos han vivido unas cosas pero saben que vienen otras. Y la gente con la que se relacionan, les hablan de la otra cosa, de lo que hay, de lo que viene… Entonces, son gente que tiene ganas de cambiar. No son gente que quieran seguir con lo tradicional..
Un buen ejemplo sería Mauricio Pellegrino.
A Pellegrino le analicé su Valencia, en su momento. Me gustó lo que pretendía tácticamente. Muy bien, muy estructurado, sabía lo que quería, fue de los equipos que más me agradó. Y fue una pena porque al final los resultados pudieron en la situación. Cuando los resultados no son los esperados, irremediablemente, pasa lo que pasa.
Quizá no llegó en el momento adecuado al primer equipo del Valencia. Empezó con mucha gente ya en su contra.
Es un club con gran exigencia. Rafa Benítez y Unai Emery, dos de los mejores entrenadores a nivel de consecución de títulos tuvieron un gran desgaste.
Unai Emey tiene una cosa muy buena como entrenador. Yo creo que lee muy bien las situaciones de juego y las explota muy bien con los jugadores que tiene. Para mí es su gran virtud. En el aspecto que hablábamos de especificidad, él da el máximo nivel. Porque en todos los equipos que ha estado ha sido capaz de adaptarse, dentro de lo que es su idea, a los jugadores que tiene para sacarle rendimiento. Fíjate la cantidad de veces que cambia sus onces iniciales, entran unos, salen otros, y muchas de esas decisiones estoy seguro que las toma en función del rival que va a tener enfrente. Cambia posicionamientos de su equipo para defender. Él varía, él juega con su equipo. En el entorno del juego, él le saca rendimiento desde su punto de vista.
Mucha diferencia entre Almería, Valencia, Sevilla… entrenador que se adapta a lo que tiene.
Sí. Y que lo hace muy bien, pero muy bien.
Cambiando de tema, ¿cuál es el papel que ha tenido para ti el fútbol de calle en la historia del fútbol?¿Qué beneficios aprecias en él?¿Cómo podemos sustituirlo, si es que podemos, ante su inminente desaparición?
El jugador llegaba con mucha más experiencia del juego. La cantidad de contextos cambiantes que vivencia en la calle son imposibles de reproducir en el entrenamiento.
La única posibilidad de devolver el fútbol de la calle a los niños es dándoles más horas de juego libre, sin condicionantes, sin conductas. Reproducir un escenario, en el que los niños sean los que dirijan la situación. Sé que parece utópico pero es la única solución que nos queda.
¿Qué ha supuesto en tu vida el Victoria CF?, club fundado por tu abuelo y en el que empezaste como jugador.
El Victoria es la casa “pequeña”, donde sabes que nunca te marchas aunque no estés. Me vio crecer como jugador y como niño. Además, mis primeros pasos como entrenador los di allí. Las prácticas del título de entrenador transcurrieron con dos equipos del Victoria. Un año con el alevín y otro con el juvenil.
¿Y el Fabril del Deportivo, tanto como jugador como entrenador?
El Fabril me lo dio todo. Mi formación personal y deportiva. Nunca podré estar lo suficientemente agradecido a lo que significó vivir durante esos años bajo ese escudo.
¿Qué objetivos te planteaste como director del fútbol base del Deportivo entre 2008 y 2010?
Seguir dándole continuidad a una idea de crecimiento sostenido, que se había iniciado en el año 2000. En ese momento se nos encarga reconstruir a un grupo de personas el fútbol base del Deportivo, ya que por motivos económicos, años antes tuvieron que eliminarlo parcialmente.
¿En qué consistió tu trabajo como scouter del primer equipo en la temporada 2012-2013?¿Cómo se relacionó tu trabajo con los distintos entrenadores que pasaron por el equipo aquella temporada?
Fue un trabajo tremendamente beneficioso a nivel personal. Tuve que reciclarme rápidamente. Después de 13 temporadas ejerciendo de primer entrenador, tuve que leer el fútbol para otros compañeros y tratar de desmenuzarle los rivales para que ellos tomaran sus decisiones.
José Luis Oltra, Domingos Paciencia y Fernando Vázquez, tres entrenadores en una temporada. ¿En qué varió tu tarea con cada uno de ellos?
Con los que tuve un trato mucho más directo fue con José Luis Oltra y con Fernando Vázquez, porque Domingos Paciencia estuvo sólo seis semanas.
Yo creo que la relación que tiene que existir entre el scouter y el entrenador es de máxima complicidad y confianza. Tú tienes que ser capaz primero de saber para quién tienes que ver el fútbol. No soy muy amigo de los protocolos de scouting. No vale el mismo scouting para todos, cada uno le da un toque distinto como entrenador. Siempre digo que el scouting es un arte. ¿ Por qué? Todos conocemos como se hace pero la mano del artista es lo que le da valor al resultado final.
Yo no soy una persona que crea en el scouting descriptivo. Es decir, no creo en elscouting de decir lo que pasa. Yo creo más en el scouting que toma partido por tu equipo y por el rival.
Interpretativo.
Justo. Esa es la palabra. ¿Por qué? Yo tengo que interpretar. Al entrenador, que tiene muchas obligaciones, yo no le puedo dar un informe de 20 folios o 25 minutos de vídeo. Él tiene que llegar con un folio, como digo yo, y firmarlo. Esto es como una empresa, el jefe al final firma el informe. Pero los mil folios te los has leído tú, tu compañero… y llega al final con tres conceptos: cómo ganarle a este equipo, cómo aprovechar sus debilidades y cómo fortalecer a nuestro equipo. Al margen, por supuesto, del análisis del balón parado. Y a partir de ahí, llevarlo al entrenamiento día sí día también.
Tú antes me preguntabas en qué me basaba para entrenar en el microciclo. Y yo te decía que en la lectura del último partido y del próximo rival. Pues, por eso, para mí elscouting, dentro del grupo de trabajo, es fundamental para poder interpretar la intensidad táctica. ¿Por qué? Porque para programar esa semana primero tengo que saber lo que mi equipo hizo bien o mal. Y luego en función del rival del próximo fin de semana tendré que acentuar determinadas cosas; prepararme para la próxima competición. Entonces, ahí el scouting debe ser interpretativo.
Pese a ello, Domingos Paciencia es un entrenador metodológicamente similar a ti. ¿O no?
De todos los que pasaron por aquí, a nivel organizativo, a nivel metodológico, el que más me gustó.

A nivel metodológico, muchos creen que si entrenamos a un equipo donde los jugadores tienen una gran inteligencia táctica, lo cual suele suceder en equipos con jugadores veteranos o con un alto nivel de comprensión, el entrenador se puede limitar más a tener la función de acabar de dar rendimiento a esa plantilla. Al final estamos hablando de jugadores de élite y muchos de ellos tienen un gran conocimiento del juego. Pero luego hay plantillas donde esto no sucede.
Por supuesto, y donde el entrenador es mucho más importante. Pero también estoy en contra de los que creen que con los jugadores buenos ya no hay nada que hacer. El ejemplo lo tienes en Guardiola. A jugadores buenos, tanto de un país como de otro, ha sido capaz de convencerles, ¡de convencerles! de que tenían que poner sus virtudes al servicio de los demás. Y eso sí que es dificilísimo. Y lo hace de una manera donde el jugador se siente importante. No que el jugador haga lo que quiera que es muy distinto. Algunos entrenadores en muchos equipos piensan que lo mejor es que el jugador haga lo que quiera, ya solucionará piensan. No. El jugador es lo más importante y soluciona en función del contexto que yo le voy a preparar, que es lo que hace Guardiola con el fútbol posicional, etcétera. Pero para eso hay que convencerlos y él lo hace.
Es lo que mejor hace, convencer.
Sin duda.
¿Qué distingue al Deportivo de la Coruña del resto de clubes?
Para un deportivista todo. Pero creo que si le haces esa pregunta a cualquier aficionado de su club te contestará lo mismo.
Para finalizar esta entrevista nos gustaría que dejases una pregunta abierta para el siguiente entrevistado de Fútbol Holístico.
¿Dentro de 10 años seguiremos entrenando, más o menos, como lo hacemos en la actualidad, con las nuevas tendencias, o hemos llegado a un punto de especificidad en el entrenamiento que hará complicado dar más pasos diferentes?


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