miércoles, 28 de agosto de 2013

MODELO DE JUEGO REFERENCIAS COLECTIVAS ENTRENAMIENTO.


JUEGO COLECTIVO.
TÁCTICA-ESTRATEGIA. ORGANIZACIÓN.


ENTRENAMIENTO.

 SISTEMA
JUEGO OFENSIVO

JUEGO DEFENSIVO.
ORGANIZACIÒN DE JUEGO OFENSIVO Y JUEGO DEFENSIVO.

Sistema: 4-3-3 ;   4-4-2 ;   5-3-1-1 ;   5-4-1 ;  4-4-1-1 .

JUEGO OFENSIVO : 3 acciones.

A -  ataque

B-   contraataque (TRANSICIONES DEFENSIVAS).

c-   estrategia ofensiva.


Ataque (de inicio, saque de meta, saque de banda, por recuperación de pelota, etc.

Organizado: toques, pases, posesión.- inicio-canalizaciòn-finalizaciòn

 Individualizado: posición, pelotazo, variantes.- inicio-finalizaciòn.


Contraataque: (transiciones defensivas) organizar- orientar – contextualizar.


Principios colectivos complementarios. Referencias individuales.

Desmarques: apoyo- ruptura.

Desdoblamientos

Espacios libres: creación- ocupación

Apoyos

Ayudas permanentes

Pared- pared con descarga-

Temporizaciones

Conservación- control+ pase. Control-dominio del juego. Juego de posesión.

Ritmo de juego- pausa-

Cambios de ritmo

Cambios de orientación

velocidad del juego- zona activa- zona pasiva. Espacios + ritmo.

Progresión en el juego- profundidad de ataque- amplitud en ataque- movilidad en ataque (juego de posición).


Estrategia ofensiva:


Còrner- segunda pelota. saque de banda. Saque de meta.

Inicio-tiro libres (golpe franco) jugadas preparadas.

penal.

Transiciones defensivas.


JUEGO DEFENSIVO.

Aspectos:

Tipo de marcaje

Ocupaciòn del terreno de juego

Estrategia defensiva.

Referencias colectivas.

Referencias individuales.


Tipo de marcaje:

Individual- zona- mixto.


Combinado

Coberturas permutas

Temporizaciones

Vigilancia. Revisión.

Entradas

Anticipación

Interceptación acoso (presionar).

Repliegues.


Ocupaciòn terreno de juego:


Normal

En repliegue

En despliegue: normal: media cancha

                            Intensivo; ¾ de cancha

                            Adelantamiento líneas.

                            Bloques


Estrategia defensiva:


Contrarrestar- anular-controlar- imponer.

Saque banda- còrner- tiros libres.

Transiciones ofensivas.


Organizaciòn acciones ofensivas:


Si se emplea ataque organizado canalizado ( toques- pases- juego posesión+ juego posiciòn).

Si se emplea ataque organizado pelotazo (movimientos de apoyo)

Si se emplea ataque individualizado.

Automatizaciones juego de posición.

Operacionalizar juego de posesión.


Organizaciòn acciones defensivas:


Caracterìsticas de nuestro juego de ataque.

Una vez definido: definir tipode marc aje , ocupación de terreno.

Adaptaciòn  al encuentro (sentido de juego).  Uso de variantes.

Si el rival busca superioridades numéricas ( repliegues- coberturas- apoyos, escalonamientos- 1x 1: táctica individual)

Si el rival busca en ataque pelotazos ( offside- presionar puntos de envìo- coberturas-

Rival  juega al contraataque (transición ofensiva) presionar- falta táctica- zona- anticipaciones.


lunes, 26 de agosto de 2013

Una profesión maldita que apasiona

Un entrenador no debe menos que preparase para recibir golpes. De pronto una serie de malos resultados, pueden generar que el técnico más entronizado, se caiga del santuario.

Entre esa estrecha línea que divide la gloria del fiasco, se debaten la gran mayoría de entrenadores, con ello conviven en el América. Un día esplendoroso se puede transformar en penumbroso.

“La mochila de los entrenadores es así. Esta es la profesión más maldita, pero nos apasiona, nos encanta. Yo decía que quería ser jugador y luego me iba a retirar, sin embargo, después probé como entrenador y me di cuenta que es lo más apasionante. Un día sos un genio y al otro, una bestia peluda. Borges dijo que el fútbol es tan popular porque la estupidez es popular”, aseguró el orientador táctico del América, Diego Umaña.

Umaña afirma lo anterior luego de saborear el amargo trago con los 'escarlatas' el pasado lunes frente al Real Cartagena. Sus dirigidos mostraron una mala cara bajo el sol de justicia que los golpeó en la heroica.

“Lo de Cartagena no fue un accidente, fue algo real, que estaba dentro de lo previsto, porque estamos sufriendo unas adaptaciones individuales y colectivas de los jugadores que llegaron al equipo para este campeonato, y por no haber podido jugar de locales. No ha sido fácil, pero lo importante es que estamos sumando y corrigiendo”.

Y añadió sobre el resbalón: “Fue otro partido a partir de los 15 minutos, con un hombre menos, porque te queda el arco rival más lejos y el desgaste se hace mucho mayor, tanto para los que atacan, como para la defensa que tiene que achicar. No se puede cometer un error tan infantil como el de Henao, que nos dejó con un hombre menos”.

Con dos juegos menos

Dos juegos aplazados en el Pascual Guerrero, serían la panacea para el América cuando apenas el campeonato está entrando en calor. Seis puntos en juegos que le podrían dar el liderato a los de Diego Umaña, siempre y cuando superen al Bogotá y Cortuluá en los choques correspondientes a la primera y tercera fecha, respectivamente.

“El América lleva el 100% de porcentaje de puntos de local, sin haber jugado en el Pascual, y llevo el 44% de visitantes, un total del 66% de rendimiento, pese a haber jugado todos los partidos de visitantes. Y si ganamos los dos partidos menos, tendremos un porcentaje buenísimo”.

Por lo anterior, luego de hacer el diagnostico de las fortalezas y debilidades de los ‘escarlatas’, Umaña sostiene que “Nunca un entrenador está relajado, uno siempre está desconfiado, sin embargo, ahora estoy tranquilo porque sé en qué nos equivocamos. Si no supiera, estaría doblemente preocupado”.

La experiencia de los rojos durante el primer semestre, les dejó como enseñanza que lo que cuenta es el embalaje final. En los cuadrangulares es donde se deben convertir las victorias en habituales.

“Todos los jugadores están comprometidos y se van a ir adaptando. En el campeonato pasado, terminamos con 7 puntos de ventaja y luego se nos lesionaron todos los delanteros. El primer paso es clasificar entre los ocho”, comentó el técnico vallecaucano y puntualizó: “Yo vine a la B porque era el América y sé que subirlo es dificilísimo. Si lo logramos, sería lo más grande. Si no lo hacemos, vendrá otro entrenador”.


jueves, 22 de agosto de 2013

ENTRENADOR. CONCEPTOS TÀCTICOS


CONCEPTOS TÀCTICOS.

*Debe entenderse que durante la construcción de una idea de juego colectiva asì como de su realización en partidos, emergerán cosas que no se esperaban debido al sistema acontecimental en el que se desarrollan, permitiendo la modificación contornal del modelo de juego ( al nivel de los detalles). Es por ello que el entrenamiento debe estar enfocado en el jugador, pero  el jugador dentro de un colectivo, dejando de ser partes tal cual, para ser fruto de su relación con el todo, de ahì a que la periodización táctica sea auto-eco-hetero.

*A la hora de construir un modelo de juego primero hay que conocer bien el medio, conocer bien el fútbol que se pràctica, tener un conocimiento de la liga en términos generales, tener un conocimiento particular del equipo, de lo que tienes a tu disposición, aquello que el equipo es capaz de hacer. Tener un conocimiento cultural del medio donde estàs, tener un conocimiento de los mejores años de ese equipo, el sistema que jugò, como jugò, què es lo que los adeptos y los jugadores están acostumbrados a hacer. Es hablar de hábitos también en el fondo, de habituación que acaba por ser cultural. Saber la cultura del club, saber la cultura del fútbol y, después, teniendo en cuenta y analizando todo esto, tener una perspectiva o tener un plano donde tù vas a integrar tus ideas y ver desde que punto hay un conflicto entre tus ideas y aquello que se presenta como la realidad. En el fondo nosotros debemos ir al encuentro de la realidad llevando nuestras ideas y no al contrario.

*“Mi reto es que la idea que siento tan mìa la transmita al vestuario. Se gana con muchos estilos, no hay fòrmulas mágicas. La solución es hacer lo que uno siente.

*Cuando emprendemos un viaje, lo primero que debemos saber es a dònde queremos ir. A veces lo tenemos muy claro pero otras veces solamente sabemos que queremos ir  a algún lugar diferente al que estamos ahora. Es como cuando navegamos  en un barco, cuando sabemos a què isla queremos ir, no nos dejamos llevar por las corrientes sino que enfocamos nuestras fuerzas en dirigirnos hacia nuestro destino luchando contra todo obstáculo que nos impida el camino hacia el objetivo marcado. Pero cuando no tenemos un destino definido, vamos probando y es màs fácil que nos dejemos llevar por las corrientes que van apareciendo.

Por tanto, cuànto mayor sea nuestra concentración en aquello que queremos conseguir, mayor posibilidad tendremos de alcanzarlo. Cuànto màs desees y te enfoques  en el objetivo que quieres conseguir menos esfuerzo te costarà poner toda la energía de tu parte en la situación. Ahora sì, hemos de saber que “ganar el partido”, por ejemplo, no depende solo de nosotros;  existen factores ajenos que influyen en ese objetivo, por lo tanto, si nos centramos en ello podemos frustrarnos puesto que por mucho que trabajemos quizá no alcancemos el objetivo. Lo único que nos garantiza el éxito es centrarnos en metas que solamente dependan de nosotros mismos, siendo màs fácil asegurar elèxito.

*El entrenador deberá formarse como un ser reflexivo, un ser organizado, un ser ponderativo, para el cual la certeza será la incerteza. El entrenador no hará porque una vez viò hacer, sino porque su intuición y reflexión le mostraràn ese camino como el mejor para alcanzar el objetivo procurado, dejando claro, que el entrenador no debe copiar el trabajo y los ejercicios a realizar, sino que debe ser èl quièn los genere, siendo dicho proceso único y singular(pensado por èl), acorde con el contexto que le rodea, y ser reflexivo con su propio trabajo.

*Todos los entrenadores hablamos de movimientos, de correr mucho. Sì, es cierto. Eso està bien. Pero hay veces que no es necesario correr tanto. El fútbol es un juego que se juega con el cerebro. Se gestiona con las piernas. Debes estar en el lugar adecuado en el momento adecuado, ni demasiado pronto ni demasiado tarde.

 

*Siempre hay que ir en busca de. Tanto en la vida como en el fútbol, existe un aire de partida, de inicio de una aventura, de emprender un viaje, de una expedición a tierras recónditas.
Solo salen en èsa búsqueda los inquietos, los aventureros, los están dispuestos a  asumir riesgos, los que quieren revelar el misterio y conocer que hay màs allà, en el lejano poderoso, magnètico e irresistible.
Quièn emprende, quièn sale en busca de, sabe que el viaje estarà poblado de riesgos, de fracasos parciales, soportando todo, superando obstáculos, para llegar triunfante.
Emprender el viaje ya es una recompensa, pues nos ofrece conocimientos, aprendizajes, crecimiento.

Vale màs la conquista de la gloria… que la gloria de la conquista.

 
*No consigo decidirme en donde comienza la organización, si en defensa o en ataque. No analizo las cosas en forma tan analítica en el fútbol.
Cuando preparo a mi equipo para el próximo partido siempre la propuesta será para ganarlo. Asì entreno igual la organización defensiva y ofensiva.
Hay conexión directa entre obligaciones defensivas y obligaciones ofensivas y su cumplimiento nos da mejores posibilidades.
No puedo decir donde comienzo a preparar a mi equipo para el partido. Es un todo.

 
*El pensamiento del equipo se instala en el marco de la colectividad.
Tiene que ver con la forma en que múltiples componentes se comportan en torno a un proyecto como si fuesen una entidad única, pero manteniendo sus individualidades, uniendo sus fuerzas, supeditando el yo …al nosotros.

 
*Los ejercicios en el entrenamiento no pueden ser un mecanismo cerrado, mecànico.
Tiene que contener con mayor o menor complejidad lo imprevisible.
Lo que lo lleva màs allà, es la cabeza de los jugadores y sabiendo el fin por lo que hacen algo y no perdiendo nunca el patrón de conexiones con el todo.
El sentido de juego nunca debe estar ausente.

 
*Jugadores capaces.
Son quiènes hacen algo distinto, sin caer en excesos individuales. Juegan con criterio colectivo pensando en dar soluciones al juego para beneficio del equipo.
No caen en el error de jugar para ellos sino para bien de sus compañeros.
Saben dar una real interpretación a lo que sucede en el juego y asì van tomando las decisiones màs adecuadas.
Las que precisamente necesita el juego para ganarlo.

 
*Las cosas casi nunca son lo que parecen.
Los resultados casi nunca explican la verdad de lo que pasò en el partido. Muchos análisis se hacen basados solo en el resultado y son injustos, y lo peor alejados de la realidad de lo que sucedió en el juego.
Son de las cosas injustas que a veces nos depara el fútbol. Pero ese tema hay que afrontarlo y seguir adelante.

*La idea en fútbol es que se tiene que privilegiar el grupo.
La cadena será fuerte aunque una pieza sea débil. No se nota o se notarà poco.
Un equipo, una institución no puede depender de un solo personaje, porque si ese personaje un dìa se pone mal, se enferma o se lesiona, cosa que le puede suceder a cualquiera. ¡Que pasarà con el equipo?
Una plantilla debe tener de todo<. altos, bajos, buenos, peores, rudos, delicados, frìos, calentones, todos en cualquier caso convencidos de sus posibilidades y sabedores de cuàl es su misión dentro del equipo.

*Siempre un buen líder en el equipo no sería buena noticia. Me gustaría que cada integrante fuera capaz de autoliderarse a sì mismo.
El que cada uno se sienta líder de sì mismo, es una gran fortaleza en un equipo.
Ese es el equipo que tiene màs probabilidades de triunfar.

*Los días malos ... hacen mejores los días buenos.
Y nos ponen de nuevo en el verdadero camino.



 

 

 

 

 

 

 

martes, 13 de agosto de 2013

EL ENTRENADOR, LA FAMA Y SU RUTINA PROFESIONAL I


EL ENTRENADOR, LA FAMA Y SU RUTINA PROFESIONAL.   I

 La Fama.
Cuando chico quería ser futbolista, pues jugar al fútbol era mi pasión, no quería otra cosa. Pero nunca había pensado en ser famoso. Quería tener éxito en mi propósito y jugar profesionalmente y claro jugar en la selección de mi país.

Lo de la fama me cogió de sorpresa, no contaba para nada con ella.

Reconozco que poco a poco me fue ayudando, por ejemplo, en el barrio me comenzaron a distinguir y me trataban súper bien; los medios periodísticos me destacaban y eso para mí significaba  promocionarme, pero sabía que todo dependía de lo que yo hiciera y de nada más.

La fama, comprendí después que le añade a la vida una cualidad grotesca.

Por ejemplo, Anthony Quinn contaba: un día corría por Central Park, en New York, y vió venir hacia él una banda de muchachos con navajas, al acercarse uno de ellos dijo: no, no, no que es Anthony Quinn, y se fueron. Ahí la fama funcionó como protección.

Es difícil ser espontáneo cuando todo el mundo te mira. La gente me habla, me saluda, se quieren tomar fotos conmigo, me piden autógrafos, me piden camisetas,  pero de un modo artificial. El hecho de ser famoso es como si llevarás un neón, se te ve por todos lados, y también a la persona que va contigo. Eso resulta incómodo y comprometedor para tu acompañante porque todo el mundo piensa cualquier cosa, y te juzgan a la ligera.

Ser entrenador es una profesión maldita, con pocos momentos de felicidad y demasiados momentos de drama, insultos, agresividad en contra tuya. Cuando termina el partido es absurdo sentirse victorioso, lo máximo que puedes sentirte es superviviente. Además no tendrás tiempo de nada pues a los diez minutos ya debes estar pensando en el próximo juego.

Cada que termina un partido se siente, independiente del resultado, un cansancio, un vacío, un algo faltó por hacer o una tensión que te acompañará toda la noche. 

Nunca hay que sentir engreimiento por ganar un partido, o un torneo. Si lo haces te estás deteniendo, no avanzarás, y eso es fatal en esta profesión en donde vives permanentemente en el límite emocional, y deberás observar, escuchar, analizar, actuar, ser y parecer,  tomar permanentemente decisiones y aunque sos consciente de que el fútbol es un deporte de errores hay que tratar de cometer los menos errores posibles y ese sería tu mejor aporte al grupo de jugadores que están a tu cargo.

 Nuestra mejor participación en las soluciones comienzan con la mejoría permanente de nuestras relaciones interpersonales, inicialmente con las personas más cercanas: la familia, compañeros cuerpo técnico, jugadores a cargo, dirigentes y luego las más distantes, con nuestro alejamiento del juicio y de la crítica destructiva; con el rechazo de compartir el deseo de destruir a otros, aunque mal hayan obrado; con el hecho de continuar nuestra labor cotidiana de servicio, permanecer justos en nuestro actuar, liderar con rigor pero con respeto, permanecer neutrales y libres de pasiones ante los hechos y las personas que comparten nuestra rutina profesional; dar al 100% nuestro apoyo físico con nuestra presencia activa, segura, convencida, solidaria.

 
Cordial y educado en el trato a los demás.

 Decir siempre la verdad a nuestros dirigidos.

 Saber motivarlos y apoyarlos en momentos decisivos.

 No dar largos discursos ni abrumar con exagerados conceptos. Simpleza

Ser justo y poner siempre al mejor.

 Ser directo y preciso en sus conceptos, indicaciones.

 Que los éxitos y la fama no logren modificar su personalidad.

 No hablar de los rivales menos ser despectivo. Nunca hablar de sus colegas.

 Manejar con inteligencia situaciones límite y no llegar nunca a la tirantez con el grupo.

 Ser el primer convencido de lo que pregona. Decir y hacer al 100%.

 En sus relaciones con sus dirigidos lo hace dando ejemplo en la resignación de egos.

 Reinventarse continuamente. Importa cómo se es hoy pero mucho más en quién se convierte mañana.

No otorgar privilegios. No transar nada con nadie que perjudique el interés del grupo.

La mente de sus futbolistas es su propiedad. El discurso, las palabras, el convencer es suyo totalmente y los hechos son de sus futbolistas que entran a la cancha.

 Hablar al grupo menos que hablar a diario en forma individualizada con sus dirigidos. Es clave. Cada jugador necesita de un tono, una frase, un concepto, un consejo, una recomendación, una exigencia, un voto de confianza, un reforzamiento de autoestima, una corrección,  diferente ,pero ellos, los jugadores, deben sentir que a todos se les trata por igual.

 No menospreciar al rival menos agrandarlo. Darle todo el valor que merece a tus jugadores y a tu equipo. Sin dejar de lado transmitir los análisis previos al partido individual y colectivamente.

 Ser obsesivo en el trabajo. Exigencia máxima.

Cada entrenador tiene particularidades a las que no puede renunciar. Sobre todo porque la conducción, es fundamentalmente : convencer. Y uno no puede convencer  a través de la ausencia de convicciones. Uno conduce, lidera, cuando defiende un mensaje en el que crea.

Yo doy al equipo mi rasgo y eso indica que hay particularidades que tengo que  imponer:  

 

martes, 6 de agosto de 2013

“Lo que yo quiero como entrenador le gusta al hincha del Junior”

El Torneo Postobón no solo se da el lujo de tener al segundo equipo con más estrellas del fútbol colombiano, el América de Cali, sino a uno de los técnicos de mejor cartel en nuestro país: Diego Édison Umaña.

El entrenador vallecaucano asumió hace seis meses el reto más grande e importante de su exitosa carrera: devolver al equipo escarlata, el club de sus amores, a la primera división.
Umaña habló con EL HERALDO de todo lo que ha vivido en los últimos seis meses al frente de los Diablos Rojos. Recordó su paso por el Junior de Barranquilla y dio su opinión sobre otros temas como la Selección Colombia y el presente de Carlos Bacca, un jugador que pasó por sus manos.

¿Por qué tomó la decisión de dirigir al América en la ‘B’?
Porque es el América. Yo llegué a Cali de Perú y la afición escarlata en la calle me lo pedía, y bueno, estoy acá trabajando en la ‘B’ y tratando de adaptarme, de la mejor manera posible, a la situación económica y estructural del club. No es fácil, solo nosotros sabemos lo que estamos viviendo para poder sacar esto adelante. Esto no se lo deseamos a ningún equipo grande del país.

Por lo menos ahora para este Torneo ya tiene un goleador de raza ¿Cómo ha visto a Martín Arzuaga?
A Martín ya yo lo tuve seis meses en Junior. En Perú casi tuve la oportunidad de volver a dirigirlo. Estoy muy contento de tenerlo ahora y esperamos que nos dé esa cuota goleadora que nosotros tanto necesitamos y sea uno de los artífices del ascenso del América a la primera división. Martín quiere hacer historia en este club.

¿Cómo está la situación económica del América, porque vimos que hizo una gran inversión con Arzuaga?
Sí, claro, se hizo una inversión importante, pero nosotros estamos esperando que se acerquen algunas empresas para patrocinar. Hay conversaciones y esperamos que todo ese proceso vaya avanzando y se vaya concretando, que es lo más importante, para que el equipo pueda funcionar con tranquilidad y con más solvencia en lo que resta del Torneo Postobón II.

En la parte futbolística, ¿en qué se diferencia la ‘A’ con la ‘B’?
El tema con el América es que todos los rivales se motivan cuando nos van a enfrentar, todos quieren jugar contra el América, es un equipo grande y con historia que está metido en la ‘B’. Cuando juegan contra nosotros hacen las cosas muy distintas a cuando juegan con otro rival. El América debe entender eso y luchar, por encima de todo, para volver a la ‘A’, que es el lugar donde debe estar.

Usted ya hace parte de la historia del Junior, así que la pregunta es obligatoria ¿Cómo ve el presente del equipo rojiblanco?
Muy bien, Junior es un grande. Uno a la distancia siempre está pendiente de cómo le va a los equipos que uno quiere y que recuerda con cariño. Estoy contento de que Junior haya comenzado ganando este semestre, esperando que vaya mejorando, se mantenga y pueda salir campeón a final de año.

¿Es difícil dirigir en Barranquilla?
En todos lados es difícil. El trabajo de nosotros como técnico no es fácil. A mí me gustó dirigir en Barranquilla, no porque haya salido campeón, sino porque lo que yo quiero como entrenador le gusta a la gente de allá. Yo quiero un equipo protagonista, que juegue bien, que salga a ganar y a la gente de Barranquilla le gusta un equipo así y que salga campeón. Además, Barranquilla es una ciudad muy especial. La clave para dirigir y triunfar en Barranquilla es entender e interpretar a la gente, al hincha y a la ciudad.

Hay un jugador que usted conoce y que fue importante en su Junior, Luis Carlos Ruiz. ¿Por qué cree que la afición lo critica tanto?
La verdad, no lo entiendo. Para mí Ruiz es un jugador de Selección, un extraordinario futbolista. Ojalá yo pudiera tenerlo en este América. Es un jugador hábil, rápido, tiene gol, juega por la banda, juega de ‘9’. Ahora que está haciendo goles sigo haciendo fuerza para que haga muchísimos más y sea cada vez un mejor jugador, porque la verdad tiene todo para triunfar.

¿Usted lo ve como ‘9’ o como un volante por el costado?
Yo lo veo en las tres posiciones de adelante, porque así preparo a mis delanteros. Que jueguen de ‘9’, en la derecha y en la izquierda. Yo juego 4-3-3 y quiero que mis delanteros manejen las tres posiciones de ataque y los entreno para que tengan esa variante.

Yo recuerdo que usted, siendo DT de Junior, decía que Ruiz debe confiar más en sus condiciones, creerse más el cuento ¿será esa la razón por la cual no termina de explotar todas sus virtudes?
Yo últimamente he estado en otro lado y no podría decir objetivamente lo que está pasando con él. En algunos jugadores el reconocimiento, la confianza y la seguridad los impulsa más rápido, pero él tiene todo para triunfar. Me atrevo a decir que aquel Junior que yo dirigí no hubiese salido campeón si no fuera por Ruiz, que hizo muchas cosas importantes en los partidos decisivos.

¿A usted le gustaría tener en su equipo a un jugador como Vladimir Hernández?
(Risas) Si, claro. Es un jugador habilidoso, super inteligente. A pesar de su estatura lo sabe todo, es un jugador muy recursivo.

¿De qué se arrepiente en su etapa como técnico de Junior?
De nada. Uno trata de hacer las cosas de la mejor manera posible. Hay equipos, no todos, pero la gran mayoría, después de salir campeón les cuesta mucho mantener eso, y a veces es importante hacer cambios que de pronto, en ese momento, no se hicieron, y los que se hicieron, quizá no fueron acertados.

¿Usted quiso seguir?
Claro que sí. Yo no me quería ir de Barranquilla, fue muy triste, pero entendí la situación. Actualmente sigo trabajando, mejorando conocimientos y agarrando más experiencia para algún día volver a dirigir en Barranquilla, porque me encanta.

¿Qué opinión tiene de Carlos Bacca, un jugador que usted dirigió en Junior y con quien vivió experiencias positivas y negativas?
Es un extraordinario jugador, un gran ser humano, que en su momento, por la juventud, hizo cosas que no debía hacer. Uno a la distancia se alegra mucho por todo lo que está viviendo en su carrera profesional. Eso lo hablamos con él en su momento, se lo pronosticamos, le aconsejamos mucho sobre algunas cosas que tenía que poner en práctica allá, y bueno, está haciendo lo que hacen los grandes, sostenerse en Europa, y eso merece un gran reconocimiento, porque en la parte personal adaptarse a otra vida, a otras costumbres, a otra exigencia, a otros compañeros y a otras condiciones no es fácil.

¿Cree que Bacca ya alcanzó su ‘techo’ futbolístico?
Le falta mucho más, porque el potencial que tiene Carlos Bacca es grandísimo. Es un extraordinario jugador y poco a poco va a ir consiguiendo cosas importantes.

¿Qué anécdota recuerda con Carlos Bacca?
Recuerdo que Bacca se sintió mucho mejor cuando Teófilo se marchó del equipo para irse al extranjero, porque ya él se sentía el ‘9’ titular. Entonces yo le dije: ‘el equipo te lo voy a tirar encima’ y a él le brillaron los ojos de inmediato. Fue ahí cuando me di cuenta que Bacca iba a hacer muchos goles, como así fue, porque salió goleador del equipo. Poco a poco fue dándonos lo que él mostraba como goleador, que es una raza aparte, una raza indiscutible y él tiene todas las condiciones para triunfar donde sea, porque es un excelente jugador.

¿Qué equipos en Colombia le gustan y cuáles cree que pelearán el título a final de año?
Por nómina Millonarios, Nacional, Santa Fe y Junior, esos cuatro equipos con seguridad estarán ahí. Quizá el Deportivo Cali también pueda meterse en la pelea. Está muy parejo el nivel.

¿Cómo va ese sueño de dirigir la Selección? ¿Todavía sigue en pie?
Ese sueño estará siempre ahí. Espero que la vida algún día me dé la posibilidad de cumplirlo. Por ahora estoy viviendo este presente y metido 100% con el América. Ya lo demás esperaremos qué nos depara el futuro.

¿Cómo ve el proceso de Selección Colombia?
Muy bien. No es fácil mantener el mismo nivel en tres años de Eliminatoria. Si uno mira, Uruguay en un mismo año salió cuarto en el Mundial y ganó la Copa América, luego se cayó. Dio la coincidencia que Colombia subió. Chile se cayó, Paraguay se cayó, Venezuela volvió a caerse ahora. Es muy difícil mantener el nivel. Nuestros jugadores, en el último año, han tenido un buen rendimiento en sus clubes y eso lo han potenciado en la Selección.

Estamos viendo una Selección Colombia que va camino a conseguir, luego de tantos años, la clasificación a un Mundial ¿Siente que estamos en presencia de otra ‘generación de oro’ como la de los años 90?
Las comparaciones son odiosas. Esta generación ya merece ir a un Mundial, ha luchado mucho para ello, se ha quedado en las últimas eliminatorias por muy poquito, ya es hora que dé el salto y haga historia. Lo tiene todo para hacerlo.

¿Qué opinión tiene de José Pékerman?
Es un gran seleccionador. Llegó en un momento justo. Estoy seguro que conseguiremos, de su mano, la clasificación al Mundial.

Por William González Badillo
Twitter: @wigoSports